
Resulta un tanto complicado comenzar un blog. No os aburriré con el parloteo del folio en blanco y demás. Por eso iremos sobre seguro. Esta vez, hablaremos de Historia. Acomodaos en el lugar elegido para sentarnos tras un largo paseo nocturno: un banco en el Santo Cristo
La pregunta que asalta a todo el mundo con referencia a la ciencia del pasado es "¿para qué puñetas sirve la Historia?". Bien, la respuesta es complicada. No fabricamos cosas tangibles. Nuestra producción ni cotiza en bolsa ni tiene índices de productividad. Entonces, ¿para qué la Historia?
¿Para ponernos en plan intelectual al criticar una película (prometo una entrada para eso)? Vale, mola mucho decir: en el S V los legionarios romanos no llevaban el escudo de "teja", sino uno redondo. Lo más que puedes sacar del contertulio es una mirada delatora: "¡¡FRIKAZO!!!" puedes leer en su mente.
No, la Historia merece mucho, muchísimo más que eso. Es una ciencia, y que no lo nieguen los físicos o los biólogos: nosotros también utilizamos el método científico; alguna seriedad merecerá. Lo que nos permite esta ciencia es concocer las formas de vida de personas como nosotros hace mucho tiempo: qué comían, cómo viajaban, cómo eran sus casas, qué valores o creencias poseían... Todo esto para mí resulta verdaderamente apasionante: es como hacer un viaje a un nuevo mundo en el que todo está por descubrr y aprender.
A los que les guste el lado más práctico, siempre se le spuede decir aquello de que "permite conocer el pasado, para explicar el presente y el futuro". O también para que cada vez que un politicastro abra la boca en referencia a nuestro pasado, podamos decir: "Como siempre, mientes".
Evidentemente, esto apenas es un pequeño atisbo de todo lo que se podría decir, pero por hoy es hora de ir a dormir y mi casa está en el otro extremo del pueblo. Mañana, después del paseo, hablamos de otra cosa.
PD: Antes de que cada uno se marche a su casa os dejo el enlace a un foro de Historia en el que tengo el placer de colaborar desde hace años. Se aprende mucho y, lo mejor, se conoce a otros tan enamorados (o Frikis) de la Historia.
http://historia.mforos.com/
La pregunta que asalta a todo el mundo con referencia a la ciencia del pasado es "¿para qué puñetas sirve la Historia?". Bien, la respuesta es complicada. No fabricamos cosas tangibles. Nuestra producción ni cotiza en bolsa ni tiene índices de productividad. Entonces, ¿para qué la Historia?
¿Para ponernos en plan intelectual al criticar una película (prometo una entrada para eso)? Vale, mola mucho decir: en el S V los legionarios romanos no llevaban el escudo de "teja", sino uno redondo. Lo más que puedes sacar del contertulio es una mirada delatora: "¡¡FRIKAZO!!!" puedes leer en su mente.
No, la Historia merece mucho, muchísimo más que eso. Es una ciencia, y que no lo nieguen los físicos o los biólogos: nosotros también utilizamos el método científico; alguna seriedad merecerá. Lo que nos permite esta ciencia es concocer las formas de vida de personas como nosotros hace mucho tiempo: qué comían, cómo viajaban, cómo eran sus casas, qué valores o creencias poseían... Todo esto para mí resulta verdaderamente apasionante: es como hacer un viaje a un nuevo mundo en el que todo está por descubrr y aprender.
A los que les guste el lado más práctico, siempre se le spuede decir aquello de que "permite conocer el pasado, para explicar el presente y el futuro". O también para que cada vez que un politicastro abra la boca en referencia a nuestro pasado, podamos decir: "Como siempre, mientes".
Evidentemente, esto apenas es un pequeño atisbo de todo lo que se podría decir, pero por hoy es hora de ir a dormir y mi casa está en el otro extremo del pueblo. Mañana, después del paseo, hablamos de otra cosa.
PD: Antes de que cada uno se marche a su casa os dejo el enlace a un foro de Historia en el que tengo el placer de colaborar desde hace años. Se aprende mucho y, lo mejor, se conoce a otros tan enamorados (o Frikis) de la Historia.
http://historia.mforos.com/
Comentarios
Me pasaré por aquí de tanto en tanto xq será como aquellas noches de largas chácharas en un banco frío, y eso mola.
No se quien dijo, "Los pueblos que olvidan su historia, están condenados a repetirla"
Aprender de los errores está muy bien, pero es mucho más sabio aprender de los errores (o los aciertos) de los demás!!
;)
Efectivamente, ese efecto de "aquellas noches de largas chácharas en un banco frío" es lo que pretendo conseguir.
PD: me ha gustado tanto la expresión que, con tu permiso, la pondré de subtítulo del blog. Gracias de nuevo.